Historia Alhambra
La gloriosa historia de la Alhambra de Granada
La Alhambra de Granada (España) es uno de los monumentos más impresionantes y emblemáticos del mundo. Construida sobre una colina que domina la ciudad, esta majestuosa fortaleza ha desafiado siglos de historia, arte y arquitectura. En esta página exploraremos la rica historia de la Alhambra, desde sus orígenes como fortaleza militar a obra maestra del arte árabe e islámico, y finalmente su transformación en símbolo de la cultura española y europea.
Los orígenes árabes
La historia de la Alhambra comienza en el siglo IX, cuando la Península Ibérica fue invadida por tropas musulmanas. En el 711 d.C., la ciudad de Granada fue tomada por el gobernante moro Tariq ibn Ziyad. Bajo el dominio árabe, la Alhambra comenzó a construirse como una modesta fortaleza en la colina de Al-Sabika, con el objetivo de defender la ciudad de ataques exteriores.
El origen del nombre “Alhambra” es algo controvertido, pero muchos creen que deriva de la palabra árabe “Al-Hamra”, que significa “la roja”, debido al color rojo de los muros de la fortaleza. A lo largo de los siglos siguientes, el complejo se expandió sin cesar, y más tarde se convirtió en la residencia real de la dinastía nazarí, que gobernó Granada entre los siglos XIII y XV.
La edad de oro de la Alhambra
El siglo XIII se considera la edad de oro de la Alhambra. Bajo el reinado de Mohamed I, arquitectos y artistas moriscos comenzaron a transformar la fortaleza en un palacio de belleza sin precedentes. La dinastía nazarí encargó la construcción de magníficas salas, patios y jardines dentro del complejo, e introdujo intrincadas decoraciones de estuco y el arte morisco de los azulejos.
Uno de los elementos más llamativos de la Alhambra es el Palacio Nazarí. Este palacio alberga algunos de los elementos arquitectónicos más impresionantes, como el famoso Patio de los Leones, con su fuente central rodeada por doce estatuas de leones de mármol. También destacan la Sala de los Abencerrajes, la Sala de los Reyes y la Sala de las Dos Hermanas.
El fin de la dominación árabe
Sin embargo, la dinastía nazarí y su dominio sobre la Alhambra tuvieron un trágico final. En 1492, los reyes católicos Fernando e Isabel conquistaron Granada, lo que supuso el fin del dominio musulmán en España y el comienzo de la reconquista católica. La Alhambra quedó bajo control cristiano y el palacio nazarí pasó a llamarse Palacio Real de Granada.
El Renacimiento y la remodelación
Con la llegada del Renacimiento a Europa, la Alhambra sufrió nuevos cambios. Los reyes cristianos, especialmente Carlos V, decidieron construir un palacio renacentista dentro del complejo, que contrastaba con la arquitectura árabe. Hoy conocido como Palacio de Carlos V, este palacio es un notable ejemplo de la arquitectura renacentista en España.
Además, muchas de las decoraciones y obras de arte moriscas fueron eliminadas o dañadas durante este periodo, y algunas habitaciones se convirtieron en capillas católicas. A pesar de estos cambios, en la Alhambra se conservó parte de la herencia árabe, y el complejo siguió siendo un importante lugar cultural e histórico de España.
Abandono y redescubrimiento
En los siglos siguientes, la Alhambra cayó en el abandono. Durante la ocupación francesa a principios del siglo XIX, las tropas napoleónicas dañaron algunas partes del complejo. No fue hasta el siglo XIX cuando se renovó el interés por conservar y restaurar la Alhambra.
El escritor y político español Washington Irving desempeñó un papel importante en el redescubrimiento de la Alhambra para el mundo occidental. En 1832 publicó “Cuentos de la Alhambra”, una serie de relatos y ensayos que describían el esplendor y la historia de la Alhambra. Su obra contribuyó a la creciente fascinación por la Alhambra y a su atractivo para artistas, escritores y viajeros.
El Renacimiento y la remodelación
Con la llegada del Renacimiento a Europa, la Alhambra sufrió nuevos cambios. Los reyes cristianos, especialmente Carlos V, decidieron construir un palacio renacentista dentro del complejo, que contrastaba con la arquitectura árabe. Hoy conocido como Palacio de Carlos V, este palacio es un notable ejemplo de la arquitectura renacentista en España.
Además, muchas de las decoraciones y obras de arte moriscas fueron eliminadas o dañadas durante este periodo, y algunas habitaciones se convirtieron en capillas católicas. A pesar de estos cambios, en la Alhambra se conservó parte de la herencia árabe, y el complejo siguió siendo un importante lugar cultural e histórico de España.
Abandono y redescubrimiento
En los siglos siguientes, la Alhambra cayó en el abandono. Durante la ocupación francesa a principios del siglo XIX, las tropas napoleónicas dañaron algunas partes del complejo. No fue hasta el siglo XIX cuando se renovó el interés por conservar y restaurar la Alhambra.
El escritor y político español Washington Irving desempeñó un papel importante en el redescubrimiento de la Alhambra para el mundo occidental. En 1832 publicó “Cuentos de la Alhambra”, una serie de relatos y ensayos que describían el esplendor y la historia de la Alhambra. Su obra contribuyó a la creciente fascinación por la Alhambra y a su atractivo para artistas, escritores y viajeros.